Hay fiesta en la Argentina... 200 años no es poco.
Ver por televisión tantas Banderas juntas, solo Banderas.
Me hizo pensar que hay algo arraigado muy profundo en el ser argentino. Amamos nuestra tierra. Amamos sus símbolos.
A pesar de los desacuerdos, las protestas cotidianas, el pesimismo, todavía somos capaces de llorar cantando el Himno, estremecernos al gritar ¡Viva la Patria!, emocionarnos al ver a un niño agitando una Bandera.
Los argentinos somos raros, complicados.
Y también somos sensibles, solidarios, amigables.
No se como seríamos hace 200 años. Tan vieja no soy. Pero si sé como somos ahora. Y aunque a mí misma me parezca contradictorio, me gusta como somos. Para ser honesta, hay cosas que me gustaria cambiar en nustra idiosincracia.Pero, definitivamente no cambiaría por nada mi identidad nacional.
A mí me gusta ser argentina
